Desde que se nace se enseña que siempre en la vida se gana y que se gana para ser y tener, cuando en realidad lo que se comienza es a perder con las experiencias mismas de la vida., desde el momento en el que nacemos y se desprende del útero de la madre se viven las experiencias de perdida.
Sin embargo se educa de manera que se haga a un lado el sentir estas perdidas y más bien a fugarnos de ellas.
La vida torrente continuo de acontecimientos no va a dejar de golpear hasta que se llegue a la comprensión de las mismas que en realidad perder es ganar, el dolor acompañante inseparable es el que abre el camino a que veamos cara a cara en que situación se decide vivir a jugar a seguir ganando o perder para encontrar-se en remansos de paz.
Queoquina.