¿Por qué tanta resistencia a lo que realmente es
nuestra naturaleza?
No hay nada más que buscar, adentro y afuera esta
nuestra divinidad.
Adentro se encuentra todo lo que el corazón dice, que
conduce al Ser,
Afuera vivimos en
el espacio más bello, reflejo de nuestra divinidad.
Solo hay que mirar a nuestra Madre Naturaleza para
volverse a encontrar,
para comprender que somos una unidad, hermosa
resplandeciente en amor.
Hay que ver al
cardumen nadando unos cerca de otros
formando una unidad en una danza sincronizada.
O como la parvada en su vuelo homogéneo, las
diferentes manadas siempre atentas a la necesidad de las mismas, en fin, el
reino animal nos habla una y otra vez a este acto de unidad con sus bellas
formas, como el alegre nado de delfines, como la paz con que un ave reposa en
el mar.
O la aceptación de las diferentes especies, como los
peces que van nadando al lado del temible tiburón, tantos ejemplos, las olas
del mar, los árboles, las nubes se armonizan con el feroz viento…solo aceptando la tempestad, dejándolo
pasar.
Por qué tanta resistencia a nuestra naturaleza llenando
la vida de deseos, apegos, dolor y sufrimiento
Una y otra vez el alma golpea dentro del hombre,
llamando muy dentro de cada ser a tomar de nuevo su verdadera naturaleza, oídos
sordos, ojos sin luz, siente latir tu corazón, nunca es tarde el llamado es
eterno, sal del samsara encuentra a tu Dios.
Queoquina
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